¿Cuáles son las enfermedades en la piel? ¿Son contagiosas? ¿Tienen cura? La piel es un órgano tan importante como los otros, pues es la capa protectora de todo el organismo, y por su exposición al exterior, siempre está en riesgo de contraer infecciones y sufrir afecciones tópicas.
La piel es un órgano compuesto por tres capas la epidermis, la dermis y la hipodermis
Las enfermedades en la piel son muy comunes, algunas son leves y otras más graves, ya que podrían durar toda la vida. Sin embargo, para cada una de ellas existe un tratamiento específico, el cual, debe indicar un especialista, es decir, un dermatólogo que se encargue de evaluar los síntomas y las causas de la afección cutánea que se esté padeciendo.
Pero, ¿Cuáles son las enfermedades en la piel más comunes? ¿Cómo se contraen? ¿Cómo se curan? ¿Cuál es el tratamiento para cada una de ellas? Te compartimos toda esta información para que te mantengan alerta ante cualquier síntoma o signo en tu piel ¡Veamos!
¿Cuáles son las enfermedades más comunes de la piel?
La piel es el órgano más grande del cuerpo humano, ya que cubre y protege cada uno de sus extremos, y está formada por tres capas: la epidermis, la dermis y la hipodermis, las cuales, llevan a cabo diversas funciones. Es la barrera protectora ante agentes externos, como las bacterias, virus, gérmenes, etc.
Además, previene la deshidratación, gracias a los fluidos que produce, regula la temperatura del cuerpo y elabora vitamina D en el organismo cuando recibe sol de forma moderada.
La capacidad protectora de este órgano es súper importante, pues puede prevenir infecciones, pero, al verse alterada o afectada por otros agentes, se podrían producir algunas patologías conocidas como enfermedades en la piel.
Estas pueden ser enfermedades temporales o permanentes, causadas por algún factor determinado o heredadas a nivel genético. Generalmente, las enfermedades en la piel no son graves, sin embargo, los síntomas y la visibilidad de sus signos suelen ser incómodas para las personas.
Cualquier elemento que irrite, obstruya o inflame la piel puede causar síntomas que, si no son tratados a tiempo terminan en problemas cutáneos graves.
Estas afecciones que suelen aparecer son enrojecimiento, hinchazón, ardor y picazón las cuales desencadenan:
- alergias
- sarpullido
- acné u otras enfermedades
- urticaria
- ampollas
- carbunco
- la dermatitis, etc.
¿Cómo se curan las enfermedades de la piel?
No todas las enfermedades en la piel son curables, algunas de ellas, con tratamiento pueden desaparecer al poco tiempo y no regresar. Pero otras, pueden quedarse por el resto de tu vida, aunque, con ciertos medicamentos se moderan sus síntomas y signos visibles.
Dependiendo de las causas, síntomas y señales de cada enfermedad en la piel, el dermatólogo que lleve tu caso sabrá cómo curarla o tratarla. Ya que no hay una única manera de curar todas las enfermedades, cada una de ellas requiere un tratamiento específico para atacar el factor que afecta la piel.
Sin embargo, hay ciertas maneras de contrarrestar y evitar las enfermedades en la piel. Estas son algunas de ellas:
- Lava tus manos frecuentemente con agua y jabón
- Evita el contacto directo, piel a piel, con otras personas, en especial si estas han tenido infecciones tópicas anteriormente
- No compartas artículos de higiene y uso personal, como cepillos, toallas, etc.
- Mantén una correcta hidratación, toma mucha agua
- Ten una dieta nutritiva y balanceada
- Colócate las vacunas correspondientes, como la de la varicela
- Cuida tu piel con limpiadores, cremas hidratantes y una rutina de higiene diaria
- Evita el uso de productos irritantes
- Usa protector solar
¿Cuáles son las enfermedades de la piel más comunes y cómo se clasifican?
Existen muchas enfermedades que pueden afectar la piel, cada una de ellas producida por diversos factores, algunos de ellos genéticos; otros ambientales. Las afecciones en este órgano suelen ser causadas por infecciones que están en el entorno de la persona, bacterias, hongos, gérmenes a los que la piel está expuesta.
Estas enfermedades pueden ser circunstanciales o temporales, y genéticas, las cuales suelen durar el resto de la vida ¡Conoce las más comunes y de las que debes cuidar! ¡Veamos!
Vitíligo
El vitíligo es una enfermedad no contagiosa que se produce como consecuencia de la destrucción autoinmune o el funcionamiento incorrecto o de los melanocitos, las células que producen melanina, la cual determina el pigmento o color de la piel y del cabello. Es una afección que puede afectar cualquier tipo de piel, pero suele verse con mayor frecuencia en pieles de tonalidad oscura.
Esta información se caracteriza por la aparición de manchas blancas en distintas áreas del cuerpo y con diferentes tamaños. Las zonas más expuestas al sol, como las manos, brazos, cara y pies, con las más afectadas por estas manchas. Pueden aparecer así:
- Patrón focal: pérdida del color de la piel en algunas unas áreas pequeñas del cuerpo
- Patrón segmentario: despigmentación en un lado del cuerpo
- Canas prematuras en el cuero cabelludo o en el vello corporal, facial.
Las manchas de vitíligo tienen los bordes bien delimitados, su apariencia puede ser blancuzca, oscura o rojiza. Su pronóstico no es grave, sin embargo, puede conllevar quemaduras solares o complicaciones como el cáncer en la piel.
La piel afectada por vitíligo rara vez recupera su color, pues no es una enfermedad curable, más si puede ser tratada para evitar que las manchas se sigan extendiendo por otras partes del cuerpo. El tratamiento para las personas con esta enfermedad comienza una vez que se realice el diagnostico mediante un análisis de sangre o biopsia.
Algunos tratamientos para equilibrar la tonalidad de la piel son:
- Despigmentación de las zonas no afectadas
- Medicamentos con cremas con corticoides
- Activación de los melanocitos mediante la exposición a los rayos UVA
- Cirugía
Acné
El acné es una de las enfermedades más comunes en la piel, y puede afectar a personas de diferentes edades. A las mujeres generalmente entre los 14 y 24 años, y a los hombres entre 16 y 20 años. Es una afección causada por varios factores, puede ser un problema hormonal, de alimentación, hidratación en la piel mala higiene o por herencia genética.
Esta enfermedad de la piel se caracteriza por la aparición de granos con sebo y comedones en el rostro, la espalda, el pecho, los brazos. Aunque, la cara es la más afectada. El acné se produce por la obstrucción de los folículos pilosos con células muertas de la piel, con bacterias o sebo que se va acumulando.
El acné puede presentarse de muchas formas, empieza con la aparición de puntos negros y puntos blancos, luego espinillas, granos más grandes, etc. Lo ideal es tratarlo cuando empiezan a aparecer los primeros signos, pues el acné se presenta en varios grados, desde el más leve hasta el más grave.
La etapa desencadenante del acné suele ser la pubertad, debido al cambio hormonal del cuerpo. Sin embargo, puede presentarse a cualquier edad. Generalmente, desaparece de forma espontánea, pero se recomienda hacer tratamientos para aliviar los signos y evitar que queden cicatrices y manchas.
Rosácea
La rosácea es otra de las enfermedades comunes en la piel, esta afección se trata de un estado de enrojecimiento y sensibilidad en la dermis que, como consecuencia, hace ver los vasos sanguíneos más visibles en las áreas afectadas.
También se pueden producir pequeñas protuberancias con pus en la piel, las cuales deben ser tratadas para evitar ciertas complicaciones, y la hinchazón de algunas zonas como la nariz. Esta enfermedad es causada por varios factores, entre ellos:
- Consumo de bebidas calientes y comidas picantes
- Ingesta de bebidas alcohólicas en exceso
- Exposición de temperaturas extremas
- Exposición excesiva al sol o el viento
- Estrés, situaciones emocionales
- Medicamentos que dilatan los vasos sanguíneos
- Alergia a algunos productos y cosméticos
Las personas con mayor riesgo de sufrir rosácea son aquellas que tienen piel muy clara, además de fumar y tomar alcohol con frecuencia, sobre todo, si son mujeres mayores de 40 años de edad.
Esta enfermedad crónica de la piel suele tener ciclos de desvanecimiento y recaída, sin embargo, quienes la sufren deben tener un tratamiento constante, el cual consta de medicamentos antiacné, antibióticos, cremas especiales.
Dermatitis
La dermatitis atópica es una enfermedad en la piel que se presenta con irritación, enrojecimiento y sensibilidad, aunque hay muchos más síntomas y signos de esta afección tan común. Generalmente, aparece en la niñez e implica resequedad, hinchazón y comezón, pues es un sarpullido que aparece en varias zonas del cuerpo.
Este sarpullido es el síntoma principal de la dermatitis, y aparece en los brazos, detrás de las rodillas, a veces en el rostro u otras partes del cuerpo. Las causas son variadas, suele aparecer horas o días después del contacto con un alérgeno, pero en algunos casos se debe a un antecedente de herencia genética.
Lo ideal es que un médico profesional diagnostique esta enfermedad y asigne tratamiento. Este suele ser con medicamentos, cremas y ungüentos que pueden aliviar los síntomas y evitar que empeores, por ejemplo, que aparezcan ampollas o costras.
Melasma
El melasma es una enfermedad que se produce manchas marrones simétricas o asimétricas en la piel, generalmente, en el rostro, bien sea en la frente, el mentón o en las mejillas. Esto se debe a un aumento de melanina, encargada de dar pigmento a la dermis, el cual se debe a varias causas. Algunas son:
- Cambios hormonales durante el embarazo
- Alta exposición al sol
- Ingesta de anticonceptivos
En las mujeres, el melasma suele desaparecer sin necesidad de tratamiento después del embarazo o cuando una mujer con la afección deja de tomar anticonceptivos. Las cremas para aclarar la piel pueden ayudar en casos persistentes de melasma.
Esta enfermedad puede curarse en poco tiempo, con el transcurso de los años o quedarse para toda la vida. Todo depende de la receptividad de la piel ante el tratamiento, el cual, debe ser indicado por un dermatólogo, y consiste en cremas y medicamentos.
Verrugas
Las verrugas son una afección muy común que puede presentarse a cualquier edad. Se trata de unas prominencías epidérmicas benignas que aparecen en cualquier parte del cuerpo, generalmente, en las manos, pues son las áreas más expuestas y que tienen contacto frecuente con superficies.
Esta enfermedad es asintomática, en la mayoría de los casos, aunque algunas personas pueden presentar dolores leves y comezón en las protuberancias y sus alrededores. Esta afección puede desaparecer con el paso de los años, pero, por razones cosméticas, quienes la sufren recurren a tratamientos tópicos y estéticos para eliminar las protuberancias, evitando así su propagación por otras áreas del cuerpo.
Esta enfermedad es causada por varios virus, entre ellos el virus del papiloma humano (VPH) y sus variantes, los cuales están presentes en diversidad de objetos y superficies. El contagio de este virus en la piel puede ser por contacto cutáneo con otra persona que lo tenga o por tocar objetos contaminados.
Varicela
La varicela es una infección viral muy contagiosa que suele afectar a los niños, adolescentes y adultos que no posean la vacuna contra la varicela. Se trata de un sarpullido, con ampollas en la piel llenas de agua, las cuales son irritantes y generan comezón. Una vez que se contrae el virus, comienza el periodo de incubación y posteriormente la aparición del sarpullido en todo el cuerpo.
Otros síntomas que suele presentar esta enfermedad en la piel son fiebre alta, debilidad, malestar general, dolor de cabeza, dolores corporales y pérdida de apetito. Para aliviarlos, los médicos indican medicamentos antivirales y se suelen aplicar algunos remedios naturales para calmar las sensaciones incómodas en la piel. Pero, la vacuna es la mejor manera de prevenir esta enfermedad.
Las enfermedades en la piel generalmente son curables, tratables, sin embargo, todas requieren diagnóstico médico e indicaciones de un profesional. Este órgano es tan importante como el resto, y por tratarse del aspecto de cada persona, lo ideal es cuidarla con una alimentación nutritiva y el uso de productos adecuados, esto disminuye el riesgo de contraer infecciones y afecciones cutáneas.
