La elección del jardín de infantes es muy importante porque estaremos eligiendo el «segundo hogar» de nuestro hijo. Es donde comenzará a crearse la separación temporal de la familia, tendrá sus amigos y aprenderá a socializar. Y en segundo lugar, porque es en el jardín maternal donde empezará a formarse la base educativa y el desarrollo de la personalidad del niño. Una buena institución hará que nuestro hijo disfrute de ir al colegio y aprenda. En esta edad, es muy importante que nuestro hijo disfrute. Es así que debemos prestar tener mucho cuidado al jardín que elegimos.
Lo primero que debemos saber es que los jardines o maternidades se dividen en dos grandes clases:
El Jardín Maternal, también conocido como guardería comprende las primeras salas: la Lactantes desde 45 días al año, Gateadores 1 año y sala de 2 (Deambuladores). En este nivel del jardín se cubren las necesidades de los niños y niñas, tales como la alimentación, higiene, y sueños. Se hacen tareas y juegos desde una mirada educativa y pedagógica.
El Jardín de Infantes se ocupa de la educación de los niños de 3 a 5 años. En este nivel del Jardín se les enseñan diferentes contenidos, ademas que, se desarrollan hábitos y conductas que regulan la vida en sociedad. La mayoría de los aprendizajes se adquieren gracias al juegos.
Pasos para elegir el mejor jardín infantil o maternal:
1) Crear un listado con los jardines o guarderías disponibles.
Lo ideal es comenzar teniendo en cuenta las recomendaciones recibidas de familiares, amigos, vecinos, u otros conocidos. La recomendacion es un excelente punto de partida, pero además habrá que tener en cuesta muchos factores como la proximidad, a la casa o el trabajo, el costo, o la calidad de la institución.
2) Visitar y conocer las instalaciones.
No solo basta el nombre y la recomendación, es importante conocer el lugar, ver que se cumplan las normas de seguridad e higiene, que haya aulas o lugares adecuados a las diferentes edades, que tenga espacios abiertos y juegos.
3) Evaluar el nivel del jardín.
Entrevistarse con la directora o responsable para evaluar el nivel profesional y humano del personal y la compatibilidad de los proyectos y objetivos institucionales con los valores que ofrecemos al niño en el ámbito familiar. Esto es uno de los aspectos más importantes. De este modo, ganaremos la confianza necesaria para dejar a nuestros hijos en buenas manos y también nos será de utilidad para saber que el niño recibirá mensajes unificados para su educación.
4) Reducir la lista.
Lo ideal es generar una lista de al menos 10 posibles jardines, que nos gustara teniendo en cuenta: proximidad, calidad, precio, y disponibilidad. Depurar la lista a 3 y elegir el jardín comparando todos los diferentes aspectos.
La colaboración entre casa y jardín
El jardín y el hogar deben ayudarse mutuamente en el desarrollo individual y en la inserción social del niño. Es imprescindible que el jardín sea compatible a nivel de principios humanos y educativos con los de la casa, o muy importante, en cuestiones religiosas. Además debe la institución debe brindar aptitudes y contenidos para la adquisición de conocimientos en áreas tan diversas como: ciencías naturales y tecnología, ciencías sociales, educación física y expresión corporal, lectura y escritura, manualidades, matemática y música. Por supuesto, una de los aspectos más importante son las maestras, y lo ideal de ser posible es conocerlas con anterioridad.
Por su parte, es muy importante que los padres colaboraren en la fase de inserción social. Deben incentivar al chico a relacionarse con sus compañeros invitándolos a jugar a casa o permitiéndoles ir a la casa de los demás.