La convivencia familiar es un factor clave esencial en la vidas de las personas, porque la familia es el grupo social más importante de cada individuo. Una convivencia amena y positiva entre miembros de la familia repercute en la salud y define el éxito que cada uno de sus miembros pueda tener en los otros aspectos de su vida: laboral, escolar, romantico, entre otros.
La convivencia familiar es un tema muy importante que las mamás debemos considerar en la crianza de nuestros hijos.
Una buena convivencia familiar es necesaria e indispensable para el buen desarrollo psicológico y emocional de los niños
Principalmente, porque una buena convivencia familiar en el hogar les brinda a los niños seguridad, confianza, contención emocional y más herramientas para construir un autoconcepto positivo, asegurando el bienestar psicológico y emocional. Además sienta el ejemplo de como los niños construirán su propia familia en el futuro y como se relacionarán con los demás integrantes: hermanos, padres, primos, etc.
Tener una familia en armonía no es tarea fácil, pero cuando trabajamos por ello con amor y disposición por el bienestar de nuestros hijos, se puede hacer más gratificante de lo que pensamos. La vida con una convivencia familiar positiva esta llena de tranquilidad, aprendizajes y éxitos que obtendremos junto a las personas más importantes en nuestras vidas, la familia.
La convivencia familiar ayuda al desarrollo de la autoestima, brinda sostén y seguridad a los miembros de la familia
Y es que, cuando un grupo familiar tiene una convivencia negativa se nota a simple vista. Primero por que todos evitan estar en casa. Compartir con los otros miembros de la familia pueden presentar incomodidad, ansiedad, dudas y peleas constantes. Al afrontar nuevos retos y desafíos los integrantes no tienen una base firme y aparece la inseguridad al tomar decisiones. En cambio, cuando un grupo familiar tiene una convivencia familiar armoniosa los miembros de la familia se muestran optimistas en los otros ambientes donde se desenvuelven ya que encuentran en casa el apoyo necesario.
Más adelante veremos consejos e información que te permitirán alcanzar una convivencia familiar más estable al igual que las demás personas del grupo familiar.
¿Qué es la convivencia familiar? – ¿Por qué es tan importante? – Beneficios: El efectos de la buena convivencia – ¿Convivencia familiar negativa? – Normas de convivencia familiar
La convivencia familiar armoniosa le brinda a cada uno de los miembros de la familia estabilidad psicológica y seguridad, pues lograrán ver su hogar como un ambiente armónico, coherente y positivo en lugar de ser amenazante y lleno de represiones como pueden llegar a convertirse, por momentos, algunas familias.
¿Qué es la convivencia familiar?
La convivencia familiar se puede definir es el espacio de vida en común de un grupo familiar, donde los vínculos y relaciones entre miembros de la familia tiene un rol principal.
Más allá de centrarnos en agregar adjetivos de cómo debería funcionar nuestra familia, la convivencia tiene como objetivo el bienestar psicológico de cada uno de los miembros, porque de esta manera se podrán vincular positivamente con las personas y crear redes de apoyo entre ellos.
El hogar es el lugar más significativo para cualquier persona y esto influirá en sus decisiones de vida.
Cuando la convivencia familiar es amena y armoniosa llegar a casa es un sosten emocional, un gran apoyo para los miembros que permiten encontrar la fuerza para convivir en los desafíos del día a día.
Cuando existe una mala convivencia familiar es dormir con el enemigo. Se vive un ambiente de conflicto, agresión y violencia que atenta contra los propios integrantes de la familia.
¿Por qué es tan importante trabajar la convivencia familiar?
La convivencia familiar contribuye enormemente en el bienestar del niño y esta es sin duda una de nuestras grandes responsabilidades como mamá.
Poderle ofrecer una familia donde las relaciones de afecto sean positivas, comprensivas y respetuosas, apoyarse unos con otros y establecer normas que respeten el lugar de cada miembro de la familia es vital para los niños.
La convivencia familiar enseña al niño a relacionarse con las demás personas y ver su hogar como un espacio psíquico seguro, donde nadie lo juzgará o se sentirá amenazado.
Una convivencia familiar armoniosa es igual a personas seguras y exitosas.
Es importante que podamos tener siempre presente que la convivencia familiar tiene como objetivo fundamental procurar el bienestar psicológico y emocional de cada uno de los miembros de la familia, para que de esta manera elementos como la dinámica y educación familiar surjan de manera natural, óptima y positiva.
Sin duda, el hogar es el principal espacio de seguridad para las personas, por lo que asegurar vínculos positivos y respetuosos se vuelve necesario porque impactará en el desenvolvimiento académico y profesional de la persona.
Esto no quiere decir que no haya peleas o discusiones. Todas las familias pueden encontrarse con diferentes conflictos donde los miembros se encuentran con intereses o valores contrapuestos.
La mala convivencia familiar implica el no respetar a los miembros y a la familia, donde los miembros se autosabotean, se critican, se juzgan o se desprecian.
Una mala convivencia familiar produce inseguridad, desconfianza y desvalorización personal como interpersonal
En otras palabras, puede haber una mala convivencia familiar sin discusiones y sin peleas, donde todo se calla y todos se odian en silencio.
En una buena convivencia familiar, también puede aparecer el conflicto pero este ayudará y fortalecerá el crecimiento de cada miembro de la familia. Cada uno podrá expresar su intereses, valores y opiniones pero todos se sentiran participen con voz y voto buscando un fin: el bien común de la familia y de los demás integrantes.
En la medida que la convivencia familiar se desarrolla es más fácil a los miembros comunicarse y poder ayudarse mutuamente.
El efectos de la buena convivencia familiar en las personas
La convivencia familiar tiene un efecto importante en cada uno de las personas perteneciente al grupo familiar y es importante conocer cuáles son los beneficios de la convivencia familiar armoniosa para todos los miembros.
Una buena convivencia familiar brinda:
- Seguridad emocional.
- Aumento de autoestima positiva.
- Habilidades para relacionarse positivamente con las demás personas, basándose en el respeto y comprensión por el otro.
- Sentirnos apoyados.
- Mayor éxito en los demás entornos donde nos desenvolvemos porque nos sentimos con vitalidad.
- Actitud positiva y mucha más disposición para realizar las cosas.
- Mayor desempeño escolar, laboral y financiero
- Seguridad para expresar de forma sana nuestras emociones a la otra persona.
- Sensación de tranquilidad al estar en compañía de familiares.
- Habilidad de poder escuchar a los demás.
- Menor ansiedad e incertidumbre
- Paz y tranquilidad.
- Mejor autovaloración
- Mayor respeto por los demás y por uno mismo.
¿Qué pasa cuando la convivencia familiar es negativa?
Cuando no hay una convivencia familiar adecuada en casa tiene efectos muy negativos en cada uno de los miembros de la familia, lo cual impacta en los distintos entornos donde se desenvuelven. Ahora, te mostraremos los efectos negativos que hay cuando los miembros del grupo familiar no se llevan tan bien viviendo juntos.
- Dificultad para concentrarnos en las actividades diarias.
- Incomodidad al estar en casa o con alguno de los miembros de la familia.
- Necesidad de estar en cualquier lugar menos en casa.
- Irritabilidad.
- Depresión, ansiedad o exceso de estres
- Sensación de pesadez en el cuerpo aunado a sentimiento de tristeza.
- Falta de confianza en los demás.
- Sensación de ser traicionado.
- Sensación de no ser escuchado.
- No tener un lugar.
- Problemas de autoestima.
- Sensación de que nadie nos escucha o que a nadie le importa
10+ normas de convivencia familiar para mejorar las relaciones en la familia
Seguramente, te has preguntado ¿Cómo mejor la convivencia familiar?
Veamos normas que te ayudarán a poner en práctica la convivencia familiar en el hogar y así puedas brindarle la mayor seguridad y bienestar a tu niño y a tu familia. Al cabo de pocos días de aplicar estas normas podrás notar la diferencia en la actitud positiva y amorosa de los niños demás miembros de la familia.
1. La opinión de los niños es valiosa
La opinión de los niños es un aporte muy valioso a tomar en cuenta, por lo que pedirla, escucharla y tomarla en cuenta en necesario para hacer cumplir la convivencia familiar positiva entre todos los miembros del grupo.
2. Relaciones basadas en el respeto
Otras de las normas esenciales para disfrutar de una buena convivencia familiar en casa es basar todas las relaciones en el respeto.
Escuchar las ideas del otro, permitir que se exprese, sin agredir o hacer uso de la violencia doméstica bajo ningún concepto, todo ello permite construir una convivencia familiar positiva ideal para los niños en el hogar.
3. No interrumpir y escuchar
Continuando con el punto anterior, es una norma muy básica pero hoy esta en desuso y se ha vuelto la costumbre de interrumpir suponiendo lo que el otro va a decir. Aprender a dejar a hablar al otro sin interrumpirlo es esencial para comprender al otro.
Aprender a escuchar hace la diferencia. Dejar de suponer lo que el otro va a decir hace la diferencia en las relaciones ya que el otro se siente escuchado y realmente podemos empezar a dar con una solución y no una suposición.
4. Expresar el amor que sienten por cada uno de los miembros de la familia
Poder expresar el amor y cariño que sentimos hacia nuestros hijos, esposo y demás familiares es parte de las normas de convivencia familiar, porque le estamos enseñando a los niños que dar a conocer sus emociones y sentimientos hacia alguien que quieren fortalece el vínculo afectivo.
Además, expresar las emociones y sentimientos le permite al niño aprender a manejarlas sanamente.
La gran mayoría de los problemas escolares de los niños son un reflejo de lo que sucede en casa
5. Respetar el espacio de los demás miembros de la familia
Enseñarles a nuestros hijos desde niños la importancia de respetar el espacio de las demás personas es vital. Es decir, darles a conocer la privacidad que ellos como niños tienen y que las demás personas también.
Por ejemplo, no usar la ropa de los hermanos sin pedir su consentimiento, tomar comida del plato de la persona que está al lado sin pedir permiso, entrar a las habitaciones sin antes tocar la puerta, entre otras posibilidades.
Además, esta norma de convivencia familiar va más allá del espacio físico, sino que también incluye el hacerles saber que cada persona necesita tiempo para expresar sus opiniones, tomar decisiones y compartir con otras personas además de él o ella.
6. Distribuir las tareas del hogar equitativamente
Otra de las normas de convivencia familiar que no pueden faltar, es la distribución equitativa de las tareas del hogar con todos los miembros de la familiar. ¡Los niños también están incluidos en la distribución!
Las tareas serán asignadas de acuerdo a las capacidades de cada uno de los miembros. Los niños se le asignarán tareas asociadas a sus propios actos, esto quiere decir que si juega en la sala, al terminar de jugar deberá recoger todos sus juguetes y colocarlos donde van.
También, recoger su plato de la mesa al terminar y llevarlo a la cocina, tender su cama al despertar, entre otras tareas del hogar. Esto permitirá inculcar en los pequeños responsabilidad por sus cosas y sentido de pertenencia, aprender a valorar lo que tienen en el hogar.
7. Resaltar la importancia de la comunicación
Las familias se mantienen estables y armoniosas en base a la calidad de su comunicación entre los miembros de este grupo familiar. Por ello, la comunicación constante, asertiva y que aporte aspectos positivos a las relaciones en el hogar siempre será considerada una norma de convivencia familiar.
Para ello es importante que cada miembro pueda identificar lo que piensa o siente y sea capaz de expresarlo para que los demás puedan comprender.
Un detalle muy interesante: Los individuos que aprender a comunicarse son los que mayor éxito tienen en la vida, ya que les es más fácil explicar sus ideas, y relacionarse con otros.
8. Dejar de gritar
Otros de los vicios de la sociedad moderna, y la televisión. Es necesario aprender a decir las cosas sin gritar. Independientemente de si alguien tiene razón o no, todos pueden decir su enojo sin gritar.
El problema de los gritos es que cuando alguien grita, todos terminan gritando. Y luego se grita por cualquier cosa y no se soluciona nada.
Es indispensable enseñarle a los niños a comunicarse sin gritar y los adultos debemos dar el ejemplo. No hay excusa para gritar
9. Aprender a compartir
Sin duda aprender a compartir forma parte de una convivencia familiar positiva y saludable, ya que al ser varias personas conviviendo en un mismo lugar amerita tener que compartir diferentes aspectos de la vida: como el televisor, la cocina, el reproductor de música, los juguetes entre hermanos, entre otras cosas por compartir.
Por ello, como mamás debemos siempre hacer énfasis en el valor de compartir entre hermanos e incluso en nuestra relación con ellos.
10. Todos tenemos algo para dar
Continuando el punto anterior, compartir no solo se trata de objetos, sino de una actitud ante la vida. Y es muy importante enseñar que todos tenemos algo para dar, algo con lo que colaborar.
Es muy importante como padres, dar ese lugar a nuestros hijos e incentivar esta sensación. Cuando no se tiene nada para dar, si bien resulta cómodo en el corto plazo uno se termina sintiendo un inútil.
Dar el lugar para que puedan colaborar, ayudar y tener algo que dar hace que las personas se sientan valoradas
Sentirse parte de la familia es sentirse útil, poder colaborar, ayudar y dar algo.
11. Reciprocidad
Muchas personas creen que el principio de reciprocidad es que si alguien hace algo por ti, tu debes hacer lo mismo. Eso es interés.
La reciprocidad simplemente se trata de hacer algo bonito por el otro sin esperar nada a cambio. Pero no se trata de dar y nunca recibir.
Por ejemplo, dar un mimo, un regalo, o un detalle a otro miembro de la familia porque si, sin más razones porque tenemos ganas de hacerle un regalo. El principio de reciprocidad se trata de que a todos nos gustan que nos mimen, que nos ayuden y que nos regalen. Pero en vez de exigirle al otro, damos el ejemplo.
La reciprocidad incentiva que uno tenga ganas de hacer cosas bonitas por el otro
La reciprocidad es uno de esos pequeños conceptos que hacen la diferencia en la convivencia familiar, pues los miembros sienten que hay alguien pensando en ellos.
12. Hacer presente la unión familiar siempre
La verdad es que no hay nada más maravilloso que sentir la unión familiar siempre, sobretodo en eventos especiales donde podamos sentir el apoyo de cada uno de los miembros de la familiar. Las graduaciones de los niños, sus eventos en el colegio, las presentaciones de danza, los cumpleaños de los padres e hijos.
La familia es el primero y más importante grupo social en el que participan los niños, por lo que sentir el apoyo de todos le brinda seguridad y aumenta su autoestima.
13. Planificar momentos solo familiares
Para que la convivencia familiar positiva se lleve a cabo es necesario que nosotras planifiquemos momentos solo para la familia, como una salida al parque, noches de películas, viajes familiares, cenas, entre otras posibilidades.
De esta manera, podremos incentivar la comunicación y cercanía afectiva entre los miembros de la familia.
14. Aprender a poner y definir limites
Una parte esencial de la convivencia familiar es definir los limites. Aquí es importante definir dos tipos de limites:
- los limites familiares: Las cosas que en el hogar no serán toleradas por ningún miembro.
- los limites personales: lo que a cada miembro de la familia no le gusta o no desea que otros le hagan, (pero a otros miembros si les puede gustar)
Por ejemplo, un limite familiar es que no se fuma en la casa (a todos nos molesta). Y un limite personal es alguien puede ser malhumorado y no le gusta que le hablen a la mañana (yo no quiero esto).
15. Ritos familiares
Definir rutinas y horarios para ritos familiares ayuda a la convivencia, y genera una unión única. Algunos son mas comunes como por ejemplo la hora de la cena en familia.
Es importante crear las propias tradiciones familiares. Esto ayuda a mejorar la convivencia y generar ese sentido de pertenencia y orgullo. Otros ritos también muy tradicionales son ir a la iglesia o juntarse a vera nuestro equipo de fútbol. Cada familia debe definir sus propios rituales y ceremonias.
Dentro de este punto, festejar los logros de cada miembro de la familia es muy importante ya que ayuda a que cada uno tenga su lugar y su momento, además que mejora su autoestima y autovaloración.
16. Cultivar la paciencia en los niños y demás miembros de la familia
Otro de los elementos esenciales para la convivencia familiar óptima es la paciencia. Sin duda, esta pudiera ser complicada de enseñar porque amerita que nosotras seamos también pacientes, pues el ejemplo es uno de los métodos por excelencia para enseñarla a los niños.
Además, cuando surjan situaciones estresantes, es importante que podamos hablar con los niños para mantener la calma y respirar profundo para que nuestro cerebro se oxigene y surjan más ideas que ayuden a solucionar la situación que se está presentando.
Virtudes para la convivencia familiar. Vivir unidos y dejar vivir
El libro Virtudes para la convivencia familiar. Vivir unidos y dejar vivir (Isaacs, 2008) nos ofrece herramienta a los padres para mantener a la familia unida de manera saludable, natural y positiva siendo los pilares del hogar, debido que al ser la principal guía para nuestros hijos, es importante que le podamos resaltar lo valioso que puede llegar a ser tener una convivencia familiar armoniosa.
El respeto, límites y confianza son los elementos fundamentales que tratan a lo largo del libro.
La convivencia familiar es necesaria en cada grupo familiar y como pilares del hogar podemos proponerla a través de estas sencillas normas mencionadas anteriormente.
La convivencia familiar resulta beneficiosa para nuestros niños, porque les brinda un hogar seguro, que aumenta su autoestima, donde pueda disfrutar cada momento que pasa en el hogar y sentir el apoyo y amor incondicional de cada miembro de la familia.
Sin duda, le estará regalando la familia más maravillosa a tu hijo.