Con motivo del día de la madre queremos contarte la historia de una madre. Emily tiene 35 años de edad y vive en una pequeña choza en la zona de Kibera, el suburbio más grande de África, en Kenia. Es madre de seis hijos que tienen 21, 18, 11, 8, 5 años y la semana pasada el más pequeño Abraham cumplió su primer año. Por su parte, su hija Yvonne tiene un niño de 18 meses de edad y ambos viven con ella.
Emily compro su casa hace cuatro años y es una casita típica de Kibera, con una habitación, paredes de barro y techo de chapa. Emily hizo su mejor esfuerzo para crear pequeñas zonas de privacidad para sus hijos y cada habitación se encuentra separada con cortinas. Las paredes están cubiertas con hojas y unas fotos enmarcadas adornan la sala. El esposo de Emily, vive en Kisumu porque trabaja afuera y le envía dinero. Emily no solo es madre, trabaja y vende sandalias en la comunidad y esta es su única fuente de ingresos.
Una madre moderna
Cuando Emily estaba embarazada del pequeño Abraham, decidió dar nacimiento en casa. En junio de 2013 el Ministerio de salud de Kenia introdujo cuidado medicinal libre para los niños, quería ir al hospital pero estaba preocupada por el costo de llegar al hospital y también contaba con la dificultad que no había nadie quien pudiera cuidar de los otros niños mientras ella estaba en el hospital.
Pero la situación empeoro, en el quinto mes de embarazo ella se encontró que tenía anemia. Sin embargo, le pidió apoyo a una trabajadora comunitaria de salud, Ana, quién voluntariamente la ayudó durante todo el embarazo.
Cuando Emily entró en trabajo de parto su hijo nació con el cordón umbilical alrededor del cuello, pero por suerte Anne fue capaz de hacer algunas maniobras básicas para ayudarle a respirar rápidamente.
Hoy el pequeño Abraham goza de buena salud, pero lamentablemente el dinero ahorrado por Emily no es suficiente para mantener a toda la familia, por lo que deberá volver a trabajar pronto.
“Ahora que mi bebé es pequeño yo estoy descansando. Quería ir al hospital pero no quería dejar solos a mis hijos. Estaba preocupada por su seguridad, y tenía miedo de que sin mí tendrían dificultades para comer.”
“Tuve anemia hasta el quinto mes, entonces tuve miedo y pensé que me iba a morir durante el embarazo. Cuando mi bebé nació tenía el cordón umbilical alrededor del cuello, pero no estaba asustada porque Anne estaba allí. Hoy estamos bien, pero mis ahorros se están agotando y voy a tener que volver al trabajo esta semana. Llevare al bebé conmigo porque no tengo a nadie para que cuide de él.”
La historia de Emily es la de muchas madres que como tú, luchan cada día por el bien de su familia y lo dan todo por sus hijos. Para todas ellas:
¡¡¡Feliz día de la madre!!!
En este día de la madre, brindemos por aquellas mujeres que nada las detiene y aunque se enfrenten a cualquier circunstancia, siempre siguen siempre hacia adelante, dando vida.
Si esta historia te emocionó, estas en una situación más afortunada y deseas ayudar a muchas madres como Emilie, en este día de la madre puedes elegir un regalo solidario de la lista de deseos de savethechildren.it , y sorprender a tu mamá. Ambas ayudarán a las mujeres menos afortunadas como Emilie pero que igual que tú lo dan todo por sus hijos.