A todos nos ha pasado que ponemos las necesidades del otro por encima de las nuestras; y cuando en realidad no podemos prestar nuestra ayuda nos sentimos sumamente culpables. He ahí la importancia de saber poner limites.
Poner límites no quiere decir que seas egoístas o que no te importe los demás,simplemente se trata de preocuparte un poco más por ti.
Poner límites en nuestras relaciones personales es una manera de respetarse mutuamente
Poner límites a las personas, trata de hacer entender a las personas qué necesitamos y qué queremos .Se trata de expresar todo aquello que nos gusta y nos disgusta;darnos importancia a nosotros mismos, pero sin olvidarnos de los demás, es decir, es un balance entre nuestras necesidad y la de los demás pero sin ser egoístas.
¿Por qué poner límites?
Si pones límites en tu vida,tendrás más autonomía,podrás conocerte mejor,en cuanto a que es lo que deseas,quieres y necesitas.Además cuando pones limites gozas de relaciones más sanas y duraderas,pues desde un principio has establecido lo que te gusta y disgusta,por lo tanto no habrá mal entendidos.
Conocerse a uno mismo
Uno de los grandes beneficios de poner límites es el autoconocimiento,pues como hemos mencionado anteriormente poner límites se trata de conocerse a uno mismo hasta donde se es capaz de llegar y hasta donde pueden llegar las personas con nosotros.
Si quieres poner límites debes conocer cuales son tus necesidades propias.Tienes que ser consciente de lo que quieres y necesitas y hacerte preguntas como: ¿qué necesitas? ¿con qué me siento cómodo? y ¿qué quiero?
Cuando pones límites además de conocerte vas a respetarte más a ti mismo y, en la medida en que esto ocurra, todos a tu al rededor van a comenzar a respetarte en función de los límites que establezcas.
Relaciones sanas y equilibradas
Cuando pones limites gozas de relaciones más sanas y duraderas,pues desde un principio has establecido lo que te gusta y disgusta,por lo tanto no habrá mal entendidos. No habrá descompensación ni desigualdad en cuando a lo que cada uno aporte en la relación.
Además vas a gozar de satisfacción personal,pues te sentirás más libre al expresar todo aquello que sientes antes los demás. La frustración y el estrés ante la ausencia de límites dejará de estar presente en tus relaciones.
Si consigues respetar tus límites y el de los demás,vas a conseguir relaciones sanas y duraderas en el tiempo. El respeto va a estar presente en todas tus relaciones y ninguno se sentirá invadido por el otro.
¿Cómo poner límites? Consejos paso a paso
Establecer límites repercute directamente sobre tu autoestima y sentimientos,por el simple hecho de hablar de ti y darte lugar en lo que necesitas. Te sentirás mejor contigo mismo,aumentando tu autoestima y perdiendo el miedo de mostrar quien realmente eres.
Si pones límites te quitaras un peso de encima al expresar todo lo que llevas por dentro sin darle tanta importancia sobre cómo se lo tomen los demás,y sobre todo sin sentir culpa por no hacer los que los demás te digan.
Pero ¿Cómo poner límites?…
Pasos para aprender a poner límites
Identifica cuáles son tus límites
Es imposible que no puedas establecer límites,si no tienes claro cuáles son tus límites.Debes de tomarte tu tiempo, reflexionar y tomar consciencia acerca de cuáles son tus límites en tu vida.Si conoces tus limites estarás bastante claro hacia donde quieres ir,cuáles son tus metas y que realmente es lo que quieres.
Pero ..¿Cómo saberlo? Hay una herramienta muy poderosa que son las emociones,pues gracias a ellas podemos identificar cuando algo nos hace sentir bien o cuando un limite esta siendo sobrepasado.Con ellas podemos identificar aquellos sentimientos que sean de tristeza,soledad,rabia,angustia,etc.
Si quieres poner limites en tu vida debes identificar aquellos que aceptas y lo que no aceptas;para ello debes procurar que estas respuestas sean sinceras y de corazón,ya que de nada sirve engañarte a ti mismo sobre todo cuando de poner límites se trata.
Acéptate y ámate
Muchas veces ,cuando queremos ser aceptados por los demás tendemos a hacer cosas que no queremos hacer.Son tantas las personalidades,temperamentos y puntos de vista de los demás,que no siempre vas a obtener su cariño y aceptación.Por ello tienes que aprender a amarte y a aceptarte para que no estés buscando el cariño de los demás.
Cada ves que establezcas un límite,tienes que recordar que es algo viene de tu propia validación ya sea desde tu punto de vista o de tus sentimientos esto no significa que sea algo “sencillo” sobre todo cuando hoy día se enseña que la aprobación viene de afuera, siempre puedes transformar esta visión, darte una pausa para observar y aceptar todo lo que surge de ti. Ámate, tu eres tu principal aliado.
Establece límites contigo mismo
Cuando identificas tus propios limites,aceptas lo que sientes y te amas a ti mismo;empiezas a respetar tus deseos y ha cumplir tus palabras.Ya ves por qué todo comienza desde el interior.
Cuando tienes claro lo que quieres es mucho más sencillo que respetes tus propios límites pues sabes de donde provienen y que tan importantes son para ti, se vuelve un deseo realmente completo, no se trata de culparte una y mil veces por no hacerlo, se trata de conocer tus razones y abrazarte continuamente para llevarte al lugar en el que deseas estar.
Acepta que poner límites es progresivo
Como cualquier hábito o actitud en la vida, la mente necesita un tiempo para reaprender y realizar las cosas de forma distinta. No te desalientes ni preocupes, si un día no pudiste ser claro con tus limites, es un proceso que requiere tiempo y aprendizaje.
Si te ha ocurrido eso debes hacerte consciente de la situación y preguntarte, ¿Qué ocurrió? ¿cómo te sientes y que es lo que realmente deseas? Tienes que darle tiempo a este proceso y mantenerte firme, adquirir un nuevo hábito requiere constancia pero cada que lo practicas te transformas más en esa versión de ti mismo ¡no hay por qué desanimarse! realiza este proceso con consciencia y aceptación hacia ti mismo.
Poner límites.Se trata de respetar los límites de los demás
Si quieres establecer límites,es bien importante que seas congruente contigo mismo y te preguntes si de verdad respetas los límites de los demás ¿Cómo reaccionas cuando un amigo o compañero te establece límites ? acaso ¿Te sientes rechazado? ¿Respetas los límites que te impongan?.
Las respuestas a estas preguntas no tiene porque hacerte sentir mal,sino más vas es una autoevaluación haber si eres consciente de los límites de los demás y si eres capas de dar lo que quieres recibir.Si de verdad eres congruente en este sentido,sera mucho más sencillo que los demás respeten tus límites,de no ser así lo que estas haciendo es potenciar esa actitud con tu ejemplo.
Tienes que tener presente,que cuando alguien establece un límite debes de respetarlo,pues esa persona ha establecido dichos límites porque debe de tener sus razones y tu de conocer o no esas razones,no tienes porque sobrepasarte has sentir a la otra persona segura para que confié en ti.
Identifica cuando no depende de ti
Debes de recordar que cuando estableces límites de forma amorosa y clara; puede que ya no este en tus manos,bueno en realidad no lo esta,el hecho de que la otra persona comprenda,cada uno de nosotros somos seres distintos y no todos nos tomamos las cosas de la misma manera,en algunas situaciones puede que acepten tus límites pero en otros momentos puede que no.
Tienes que aprender a identificar cuando las cosas no dependen de ti y no están bajo tu control.Aunque lo que puedes controlar es comprender tus límites y respetarlos; la reacción de la otra persona es algo que no puedes elegir.
También tienes que saber identificar cuando aquellos que están a tu alrededor,no están respetando tus límites,si te esta ocurriendo esto,no puedes bajar la guardia.Ahora sabes que el límite que has establecido surgió de algo sincero y profundo en tu interior, tu eres la prioridad, que sabes valorar tus sentimientos y decisiones, así como también respetas la forma de actuar de los demás.
Ejercicios para aprender a poner límites ¿Cómo decir NO de forma asertiva?:
Cuando hablamos de asertividad, no referimos a aquella capacidad de expresar tus deseos de forma amable, abierta, directa y adecuada. Si quieres aprender a poner límites tienes que ser firme con tu decisión y expresarlo de forma respetuosa.
Si haces uso de las siguientes técnicas podrás decir no de forma asertiva:
Se claro y directo
Comienza a decir tu opinión y sentimientos de forma directa, pero no te estés justificando, en caso de que quieras externalizar tus motivos, añade una pequeña explicación, procurando siempre que sea breve y sencilla, pues si lo haces muy extensa,va a perder credibilidad:
- ¿Vendrás a mi casa esta noche?
- No, gracias, hoy quisiera descansar.
Se empático pero firme
Si te pones en los zapatos de los demás y validas su punto de vista y sentimientos, podrás exponer tus puntos con claridad. Por ejemplo:
Entiendo que necesites dinero y te sientas presionado, pero esta vez no puedo prestarte, pues tengo gastos importantes que ya tenía contemplados, quizá pueda ayudarte de otra manera.
Si no te sientes seguro posterga la respuesta
Puede que te hayan hecho una propuesta de la cual no te sientes totalmente seguro para responder y por el momento no puedes tomar una decisión , en este caso, puedes postergar tu respuesta para pensarlo mejor y ser más certero con tu decisión:
- ¿Quieres contratar la promoción de teléfono móvil a un precio especial?
- En estos momentos no puedo darte una respuesta ¿pero qué te parece si te llamo en el transcurso de la semana para corroborarlo?
Mantente firme ante juicios de valor
Si una persona no acepta los límites que le has establecido y te reproche ser “malo” porque no cedes a su petición, debes continuar marcando tu limite de forma clara y precisa, explica que eso no tiene ninguna relación con el afecto que tienes o algún juicio de valor:
- Que malo eres por no ayudarme a acabar el reporte.
- No puedo posponer mis actividades, pero eso no tiene nada que ver con el amor que siento hacia ti.
Ofrece una solución alterna
Puedes ofrecer una solución alterna cuando colocas un límite a una petición pero deseas resolver el problema, esta técnica es muy útil y más en cuestiones laborales, en las que es necesario solucionar los conflictos que se presenten:
- Necesito el reporte financiero para mañana a primera hora.
- Puedo avanzar una parte o utilizar informes pasados para que comiencen a trabajar.
¿Por qué resulta tan difícil poner límites?
No es una tarea fácil poner límites,no es un secreto que a muchos nos cuesta ponerlos. Los motivos son muy variados y todo depende de cada quien. Hay quien no los pone para evitar los conflictos.
Muchos no establecen límites por temor a quedarse solos. Algunas personas creen que no ceder a lo que les piden, es ser egoístas. Y otras simplemente porque le dan más importancia a los deseos y necesidades ajenas antes que ha las suyas.
Tradicionalmente, hemos sido educados para complacer las necesidades de todos; para «ser buenos». No seremos felices pero sí que somos buenos.
Abrimos paréntesis en esto de «ser buenos» pues si bien es cierto que ser solidario y proveer nuestra ayuda cuando alguien lo necesita si nos hace ser buenas personas, sin embargo esto no quiere decir que tengamos que decir, que si a todo.
Como se ha dicho,hay que quererse a uno mismo para poder querer a los demás,es decir, que debemos preocuparnos también por nosotros y saber establecer un límite cuando es necesario,tenemos que olvidarnos de eso,de que si no ayudamos a los demás en todo momento estamos siendo egoístas,pues si seguimos con ese pensamiento,nunca vamos a lograr poner límites.
Hay que saber distinguir cuando en realidad se esta siendo egoísta y cuando estamos perturbando nuestra paz por el beneficio de los demás.
«Poner límites no es solo saludable, en muchos casos es vital para sobrevivir»