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Embarazo interrumpido: Tipos, causas y consecuencias

¿Qué es un embarazo interrumpido? ¿Cómo se clasifica el embarazo interrumpido? Quizá pensarás que un embarazo interrumpido es un aborto intencional, pero, no siempre es de esta manera. El término se refiere a varios tipos de abortos que existen, tanto los espontáneos como los inducidos, quirúrgicos, etc.

El embarazo interrumpido puede efectuarse hasta la semana 22 de gestación

Interrumpir un embarazo es una decisión personal que amerita mucha responsabilidad, ya que debes garantizar que tu salud y vida no corran peligro. Pero, no siempre parte de una decisión. En algunos casos los embarazos son interrumpidos de forma espontánea y natural, esto se da por varias causas, generalmente por malformaciones en el feto.

Hay varios tipos de embarazos interrumpidos ¿Desconoces cuales son? A continuación te compartimos más de cada uno de ellos, la forma en que se manifiestan y realizan, sus causas, síntomas, consecuencias y posibles riesgos ¡Veamos!

La interrupción de un embarazo puede causar en la mujer bajos estados de ánimo y sentimientos de culpa, aún cuando se trate de un aborto inducido

¿Qué es un embarazo interrumpido?

El embarazo interrumpido, también conocido como aborto, es la pérdida o interrupción del embarazo antes de las 22 semanas de gestación, cuando el feto pesa aproximadamente 500g.

La interrupción del embarazo puede darse por diversas causas y desencadenar una serie de consecuencias, las cuales dependen de si el aborto es espontáneo o inducido.

La pérdida de la gestación de un embrión es la mejor definición para el embarazo interrumpido, pero, en ella hay una clasificación importante de conocer, pues no todos los abortos se producen de la misma manera. Sin embargo, todas coinciden con la expulsión del feto por la vía vaginal.

La interrupción del embarazo suele ser durante las primeras semanas de gestación, sin embargo, esto suele variar según el tipo de aborto que presente la mujer y su causa. En algunas puede ser hasta de las semana 22 de gestación y, cuando se trata de un procedimiento legal e intencional debe ser hasta la semana 14 de embarazo.

Independientemente del tipo de aborto y su causa, la atención médica es indispensable y obligatoria en el embarazo interrumpido

¿Cómo se clasifica el embarazo interrumpido?

El embarazo interrumpido puede ser espontáneo o intencional y, dependiendo de cual sea el caso, parte su clasificación.

En algunas mujeres se presenta por problemas relacionados con la salud reproductiva; en otras, se trata de complicaciones en el feto y cuando se habla de un aborto inducido se refiere a aquellos que son planificados por parte de las gestantes.

Estos son los diferentes tipos de embarazos interrumpidos:

Aborto espontáneo

El aborto espontáneo es el que se da de forma no intencional por causa de diversos factores de salud y desarrollo en el feto o en la mujer gestante. Suele ocurrir durante las 12 primeras semanas de gestación y para ello no se precisa ninguna intervención quirúrgica, pues la expulsión del embrión se da sola.  Cuando se da a partir de la semana 20 pasa a denominarse muerte fetal, que es otro tipo de embarazo interrumpido.

Es importante saber que más de la mitad de los óvulos fecundados no son viables y se expulsan de forma espontánea. Las mujeres no suelen percibirlo de inmediato porque solo se trata de un ligero sangrado, generalmente, más abundante que la menstruación.

Causas

La causa más común de aborto espontáneo se debe a problemas en los cromosomas de los embriones. Sin embargo, en la gestación pueden incidir otros factores que afectan el desarrollo del feto.

Por ejemplo: niveles hormonales anómalos, diabetes no controlada, problemas con el cuello uterino, reacciones a algunos medicamentos, infecciones, obesidad u otras patologías.

Las principales causas son:

  •  Edad avanzada: Mientras más mayor sea la gestante,  mayor es la probabilidad de sufrir un aborto espontáneo, sobre todo, al pasar de los 40 años de edad. Pues, las mujeres de edad avanzada son más propensas a concebir un bebé con alguna anormalidad cromosómica, esto representa un gran factor de riesgo.
  • Antecedentes: Si la mujer ha tenido anteriormente abortos, es posible que vuelva a sufrirlo.  Sobre todo, si involucra al menos dos pérdidas anteriores y seguidas. Generalmente, cuando es así su embarazo no se desarrolla satisfactoriamente.
  •  Historial médico: Las mujeres que padecen ciertas enfermedades y afecciones crónicas como la obesidad, diabetes, problemas con la coagulación de la sangre, enfermedades del sistema inmunológico y afecciones hormonales, son muy propensas a tener abortos espontáneos. Corre el mismo riesgo si posee infecciones como VIH, rubeola, sarampión o algún tipo de virus.
  • Problemas uterinos o cervicales: Es probable que quien tenga malformaciones congénitas del útero, un cuello uterino débil o fibromas uterinos sufra un aborto espontáneo.
  • Consumo de estupefacientes: El consumo constante de tabaco, drogas y bebidas alcohólicas se consideran factores de riesgo en el embarazo, por lo que, si la madre es consumidora podría sufrir un aborto espontáneo durante las primeras semanas de embarazo.

El 70% de las causas de un aborto espontáneo se debe a que el óvulo fecundado posee un número anormal de cromosomas y se imposibilita su desarrollo

Síntomas

Un aborto espontáneo puede presentarse con síntomas muy variados, algunas mujeres presentan lumbalgia, dolor abdominal, cólicos o sangrados vaginales; otras abortan sin darse cuenta, pues no presentan estos malestares. También se puede presentar distensión abdominal, calambres, nauseas o repulsión a los olores, pero son síntomas leves y pasajeros.

Cuando es durante las primeras semanas, este tipo de aborto se da expulsando el tejido por la vagina de forma natural. Cuando supera las 20 semanas de gestación es necesaria una cirugía o la toma de medicamentos para expulsar lo que hay en el útero. En ese caso se trataría de un aborto séptico y debe tratarse de emergencia para evitar complicaciones, infecciones, fiebre, etc.

Los abortos espontáneos suelen darse en un 20% de los casos, la mayoría cuando son gestantes primerizas

Muerte fetal

Se considera muerte fetal aquellas gestaciones que se han interrumpido a partir de las 20 primeras semanas de embarazo. Para extraer el feto del útero se tiene que recurrir a una cirugía y sus causas pueden ser variadas también. Solo 1% de los embarazos la sufre.

Causas

  • Tabaquismo y consumo de alcohol, drogas
  • Hipertensión arterial
  • Diabetes no controlada
  • Preclampsia y eclampsia
  • Enfermedades infecciosas
  • Anomalías congénitas graves, posmadurez o lupus, entre otras patologías

Síntomas

Una muerte fetal puede manifestarse cuando los movimientos del bebé han disminuido, también con dolores en la pelvis, la espalda o el vientre.

La muerte fetal suele darse en mujeres que ya han presentado riesgos en su embarazo, sobre todo, si tienen historial médico delicado

Aborto inducido

El aborto inducido es el que se realiza de forma intencional, es decir por voluntad propia de la mujer. Este tipo de aborto puede realizarse de dos formas o procedimientos: el médico y el quirúrgico.

El aborto médico consiste en tomar un medicamento que ocasiona la interrupción del embarazo. Este se puede hacer durante las primeras 9 semanas de gestación y suele ser el más común. Para ello generalmente, se usa la mifepristona que es una hormona que bloquea la progesterona.

Aunque, hay otros medicamentos que se toman durante tres sesiones bajo supervisión médica hasta dar por hecho el aborto. Con este método se pueden presentar sangrados vaginales, cólicos, diarrea o malestar estomacal.  Es un 97% efectivo.

Por otra parte está el aborto quirúrgico, el cual consiste en extraer el feto mediante una cirugía y se puede hacer de dos formas. Una es por aspiración con vacío manual, la cual se hace durante las 12 primeras semanas de embarazo. Con ella se extrae todo el tejido que contiene el útero con un instrumento succionador de manera manual.

Asimismo, está la dilatación y evacuación, que es un tipo de aborto quirúrgico que se puede practicar tras el primer mes de embarazo pero siempre antes de la semana 13. Consiste en extraer el tejido que reviste el útero, pero usando una máquina.

De ambas formas se dilata el cuello del útero y se introduce un tubo para succionar todo aquello a eliminar, completando así el aborto.

Síntomas

Los posibles malestares se manifiestan tras el procedimiento, estos suelen ser cólicos menstruales y sangrados vaginales.

Este tipo de aborto puede ser doloroso y se aplica anestesia solo si se superan las 13 semanas de gestación

Causas

Más que causas, son razones, pues el aborto inducido suele ser una decisión que la mujer toma tras sufrir una eventualidad inesperada. Las razones por las que se decide interrumpir un embarazo suelen ser:

  • Falló el método anticonceptivo y el embarazo es considera como un accidente o simplemente no es deseado por la pareja en el momento
  • El embarazo fue producto de una violación y la madre no acepta al bebé por tratarse de una situación dolorosa
  • La mujer embarazada es joven y no quiere ni está preparada para tener un bebé. En ello incide el rechazo social y familiar
  • Padece problemas físicos y mentales que imposibilita que la mujer se responsabilice del bebé
  • La mujer embarazada no se siente apoyada para el proceso, por ejemplo, tiene problemas con su pareja
  • Tiene problemas económicos que imposibilitan a la mujer hacerse cargo de su bebé
  • El bebé posee graves problemas de salud o alguna malformación genética y la madre lo rechaza o pone su vida propia en riesgo
Cada mujer tiene sus razones privadas para decidir interrumpir su embarazo, sin embargo, esta decisión también depende del permiso legal en cada país

Consecuencías y complicaciones de un embarazo interrumpido

Un embarazo interrumpido desencadena una serie de complicaciones cuando no se realiza con los procedimientos médicos adecuados. Sin embargo, los países que legalmente permiten estas técnicas cuidan que no se ponga en riesgo la vida de la mujer que decide culminar sus gestación de forma voluntaria.

Por otro lado, las consecuencias dependen del caso, ya que, cuando es espontáneo, las secuelas suelen ser psicoemocionales y no físicas (a menos que sean abortos muy seguidos que imposibiliten a la mujer convertirse en madre).

En cambio, si se trata de aborto inducido, las consecuencias van dirigidas a la salud porque se trata de una decisión que involucra la integridad de la practicante.

Las consecuencias de un embarazo interrumpido dependen del tipo de aborto que haya tenido la mujer, si se efectúa de forma espontánea, sin desearlo, o como  parte de una decisión.  En ellas también influirá la legalidad que tiene la práctica en su país, pues de no ser legal conlleva problemas con la ley y hasta con su salud, pues se puede exponer a lugares sin control sanitario.

Las consecuencias que suelen relacionarse con el ámbito psicológico y emocional, son: 

  • Sentimiento de culpa
  • Ansiedad
  • Depresión
  • Agresividad
  • Sentimiento de fracaso

En cuanto a otras consecuencias y riesgos, deberán enfrentarse a:

  • Problemas de salud cuando se realiza de forma clandestina, pues se corre el riesgo de poca salubridad e higiene. En estos casos se pudiera estar exponiendo a infecciones e incluso a la muerte
  • Problemas emocionales y psicológicos, en especial si la mujer ha tomado una decisión apresurada y con poca información del tema
  • La interrupción de un embarazo no debería ocasionar ningún problema físico para la mujer (si se hace de forma correcta y legal), a excepción de algunos sangrados y dolores abdominales. El procedimiento no significa que más adelante la mujer no pueda concebir.
Se debe destacar que no todas las mujeres sienten esto, algunas lo superan con facilidad, sobre todo, cuando su aborto ha sido una decisión voluntaria. Sin embargo, pueden llegar a tener un bajo estado de ánimo

¿Qué tan seguros son los abortos inducidos?

Los abortos inducidos son procedimientos muy seguros y sencillos, siempre que se realicen cumpliendo normativas de higiene y salubridad como lo estipula la ley. Pues así, se garantiza que sea como cualquier otra cirugía quirúrgica sin poner en riesgo la vida de la mujer.

No es común que en este procedimiento o tras él se presenten problemas graves o complicaciones, ya que ni siquiera amerita hospitalización. Pero, como en todos los procedimientos médicos hay ciertos riesgos que el profesional a cargo te hará saber.

Sin embargo, debes saber que los abortos inducidos realizados de forma no legal y clandestina representan un riesgo mayor. Estos no son tan seguros, ya que las personas que lo ejecutan no se amparan en la ley.

Si has de realizarte un aborto de forma intencional, lo mejor es que lo sea en una clínica especializada en este procedimiento. Al ser así tendrás mayor seguridad, pues los abortos son similares a otros procedimientos médicos y se realizan con frecuencia en los países que lo han aprobado.

De todos modos, puedes tener en cuenta que a veces se presentan algunas complicaciones, como:

  • El embarazo está tan avanzado que no se logra efectuar y la gestación continúa
  • Quedan restos de tejido del embarazo en el útero
  • Presencia de coágulos de sangre en el útero
  • Sangrado muy abundante
  • Lesiones en el cuello uterino, útero u otros órganos
  • Reacción a los medicamentos suministrados
Generalmente, la mujer solo presenta sangrado vaginal en las siguientes 2 horas, más un dolor o malestar abdominal y fiebre. Ante cualquier malestar o irregularidad es ideal consultar con el especialista que te atendió o acudir a un centro médico

Ventajas del aborto legal

Un embarazo interrumpido de forma voluntaria y legal tiene varias ventajas. En primer lugar, la mujer no pone en peligro su vida al recurrir a este método de forma clandestina en lugares no aptos.

Además, se garantiza atención médica especializada y adecuada, bajo las condiciones sanitarias y legales del país. Así deberá practicarse como cualquier otra operación quirúrgica.

Se evita que la mujer se sienta obligada a traer al mundo un bebé que no desea. Esto también evita que los infantes nazcan en hogares con problemas económicos y afectivos.

¿Qué hacer después de un embarazo interrumpido?

Las recomendaciones post aborto suelen ser las mismas para quienes han tenido un aborto espontáneo y un aborto inducido. Pues en ambos casos se debe guardar reposo y buscar fuerzas afectivas para no experimentar sentimientos que bajen la autoestima de la mujer.

  • Para evitar que las consecuencias emocionales afecten a la madre con graves estados de ansiedad y depresión, es necesaria la atención médica y profesional.
  • También es indispensable el apoyo familiar, aun si se deseaba el aborto, ya que algunas mujeres pueden sentir que “han cometido un error”.
  • Luego de un aborto es importante hacer un chequeo ginecológico para descartar complicaciones. Si es aborto inducido, se realiza un examen del útero para determinar si queda tejido fetal en el mismo y proceder a eliminarlo.
  • También se estudia si los restos expulsados correspondían a un feto o a masa de células que son el resultado de un óvulo no fecundado correctamente.
  • Al transcurrir unas 4 semanas después del aborto, el ciclo menstrual vuelve a la normalidad. Sin embargo, es importante mantenerse en chequeo con un ginecólogo para descartar problemas o complicaciones de salud.

El embarazo interrumpido puede ser espontáneo o inducido, y dependiendo de cual sea el tipo, se desencadenan síntomas y consecuencias.

En caso de ser espontáneo es muy importante acudir al médico y buscar refugio emocional; mientras que, cuando se trata de un aborto inducido, es primordial contar con la información del procedimiento para resguardar la vida de la mujer.

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