Al ser mamá te conviertes en todo para ese pequeñito que esta a tu lado, convirtiendo esto es una de las experiencias más maravillosas de tu vida y aunque ya no puedas realizar ciertas actividades, el privilegio de compartir cada minuto con el o ella siempre recomenzará cualquier esfuerzo.
Hay situaciones típicas que nos suceden a todas las mujeres cuando somos madres, y es en ese momento cuando te das cuenta cuan comprometida estas en esto de la crianza donde el instinto en ocasiones es el guía mas adecuado.
Estas son las 10 situaciones típicas en la vida de una madre ¡Veamos!
Tomar una ducha es un privilegio y una necesidad: cuándo tu mamá, hermanas, pareja o cualquier otra persona de tu entera confianza llega a casa y tienes esa posibilidad de tomar una ducha, es un momento mágico donde relajarte y salir renovada son los objetivos, ya que hay que hacerle frente a lo que vendrá horas después. ¡Tu bebé necesita una mamá que este presta y relajada para cuidarle! Y la ducha es la clave para recuperarte y seguir.
Aprendes los porqués de sus llantos: Cuando eres madre primeriza todo te asusta, pero tranquila, esto es algo que a todas nos sucede, con el tiempo aprenderás a diferenciar un tipo de llanto a otro, tan al punto de saber si llora por sueño, hambre o dolor.
La Leche materna: si eres de las que le ofrece a sus bebe lactancia materna exclusiva, sabrás que siempre debes llevar una o dos blusas adicionales en tu cartera, por esas posibles perdidas involuntarias de tu sagrado liquido. Pero también sabrás lo practico que es tener tus senos siempre disponibles para alimentar a tu bebé.
La Lucha con el peso: después de dar a luz es una de las preocupaciones que mas nos asaltan, queremos recuperar nuestra figura y lucir hermosas para nuestra pareja, pero la verdad es que pocas mujeres logran mantener su figura luego del embarazo. Sin embargo, si esto te sucede recuerda que la lactancia materna es un remedio infalible para lograrlo mientras le das el mas sano de los alimentos a tu bebé.
La felicidad de que este dormido: puedes pagar para que ningún ruido pueda entorpecer el descanso de tu bebé, y es que en estos sagrados minutos donde puedes decidir hacer lo que te plazca, descansar, consentirte, ver tv o atender tu hogar. Aunque ¿a cuantas de nosotras no nos ha sucedido que al dormirlos nos quedamos contemplándolos y el tiempo vuela y no hicimos nada?, pero sin duda son los mejores minutos junto a el o ella.
Tus amigas solo hablan de lo que hicieron el fin de semana: lo sabemos, antes de nacer tu bebé pasar el fin de semana con tus amigas o pareja en fiestas o paseo era súper divertido, pero estamos seguras que no cambiarias jamás los fines que pasas con tu bebé por hacer algunas de las cosas que hacías antes ¿verdad?
¿Dormir? Cualquier lugar es apto para ello: en el metro, autobús, el coche de tus esposo o compañera de trabajo, la fila del supermercado, tu escritorio a la hora del almuerzo, cualquier lugar es apto para cerrar tus ojos por un par de minutos y recargar baterías para lo que estepera cuando llegues a tu casa. ¡Los bebés no se descargan!.
Poder tomar un trago es una bendición: llega el viernes y luego de que tu bebé ya ha quedado plácidamente dormido, es la oportunidad para que disfrutes de una buena copa de vino, a la luz de las velas, con una cena romántica, leyendo un buen libro, es algo que ¡Cualquier madre lo merece!.
En el transporte publico ya nadie te ofrece su asiento: cuando sales a la calle y debes hacer uso del mismo y no llevas a tu bebé, ya nadie te ofrece su espacio y es que ese es uno de los placeres de lucir una linda pancita o llevar a tu hijo en brazos, no importa cuan full este tu siempre iras sentada gracias a la caridad de un noble caballero.
Te conviertes en una mujer multitarea: preparar cena, atender al bebe, colocar ropa en la lavadora, contestar el teléfono y limpiar son tareas que puedes realizar de forma simultanea y perfectamente, y es que de no ser por la naturaleza que nos dio esta capacidad no se que seria del mundo de la mujeres que son madres.
Seguramente estas situaciones te han causado gracia y te haz sentido identificada con muchas de ellas y es que después de todo ser mamá te convierte en una mejor persona y saca capacidades que no sabias que tenias. Las cuales ves recompensadas por el mejor pago del mundo ¡la sonrisa de tu bebé!
jajajajaja yo al revés dando el pecho… me entra un hambre horroroso! pero siempre de chocolate (y no un poquito, si no tableta entera ????????????????)