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¿Cómo organizar la ropa de los niños? 10 ideas super prácticas

¿Cómo organizar la ropa de los niños?

Mantener ordenada la ropa de nuestros hijos puede parecer una tarea imposible, sobre todo si son pequeños. Muchas veces nos frustramos porque no logramos que ordenen como nos gustaría, pero con paciencia y constancia se pueden lograr grandes cambios. Veamos 10 claves esenciales que nos ayudarán a organizar la ropa de los niños

Lo primero que tenemos que hacer es ponernos por un ratito en el lugar de los más chiquitos y pensar si así como tenemos la ropa y los zapatos ordenados en este momento, realmente funciona. ¿Les damos herramientas para que puedan ordenar ellos mismos? ¿Categorizamos la ropa o está todo en un mismo lugar, y para encontrar un par de medias deben sacar primero diez remeras?

Para que cualquier sistema de orden funcione, lo más importante es que esté adaptado a quienes lo usan, por eso debemos pensarlo desde el lugar de nuestros hijos para saber qué es lo que realmente los va a ayudar.

10 ideas que te ayudarán a organizar la ropa de los niños

Organizar la ropa no es sencillo, pero para que puedan planificar algunos cambios, les dejo 10 tips que funcionan para todas las edades:

  1. Clasificar: separar la ropa por categorías (invierno y verano, y dentro de cada una: remeras, pantalones, abrigos, etc.) Esto permite ver si tenemos artículos repetidos o si necesitamos agregar algo. Luego separar lo que no van a volver a usar. Se puede donar o vender, pero lo que decidan hacer, que sea lo más pronto posible. Si no, corren el riesgo de volver a poner  todo en el armario, y no estarían avanzando.
  2. Si van a guardar ropa para hermanos o primos, lo mejor es separarla por edades en cajas plásticas con tapa. Rotulan cada una con el talle o la edad correspondiente, y cuando lo va a usar el más pequeño, no tienen que bucear entre pilas de ropa de diferentes tamaños. Simplemente buscan la caja que precisan y el resto se mantiene ordenado.
  3. La ropa de la escuela debe tener un lugar especial, así todos los días al cambiarse saben dónde buscar lo que necesitan.
  4. Separar los disfraces del resto de la ropa. Muchas veces el desorden se genera porque está todo mezclado y los chicos terminan sacando todo a la hora de jugar. Los disfraces pueden estar en un canasto o un perchero a su altura, que les permita tomar lo que quieran sin desacomodar el resto.
  5. Usar perchas acorde al tamaño de su ropa. De lo contrario las prendas quedan mal colgadas, se caen y generan más desorden. Siempre es mejor invertir en perchas de madera de buena calidad, o de plástico resistente. Es un gasto que hacen una sola vez pero las va a ayudar por años.
  6. Tener cajas o canastos para agrupar prendas similares. La ropa interior, que es pequeña, conviene que esté dentro de contenedores para que no quede dando vueltas dentro de los armarios. También se pueden usar divisores plásticos, que se ubican en el interior de los cajones según la medida de las prendas, y permiten aprovechar al máximo el espacio.
  7. Etiquetar los cajones. Si ya saben leer pueden usar las palabras, y si no dibujos que ellos identifiquen. Las etiquetas se pueden comprar o hacerlas en casa con dibujos que bajen de internet. Así ellos mismos saben dónde buscar lo que se van a poner y dónde guardar lo que ya usaron. Esta es una de las formas más sencillas y prácticas para mantener el orden y organizar la ropa de los niños.
  8. Poner un canasto para ropa sucia en la habitación. De esa forma ellos mismos pueden separar la ropa que va al lavadero. Cuanto más temprano empiecen a formar estos hábitos, más fácil les va a ser incorporarlos.
  9. Si no tienen lugar suficiente en el placard, utilicen el espacio debajo de la cama. Allí pueden poner cajas plásticas con rueditas, para que sean fáciles de sacar cuando las van a usar. O incluso organizadores de tela con cierre, que se consiguen fácilmente en supermercados. Son una buena solución para la ropa fuera de temporada, la que les quedó chica pero la guardan para los más pequeños, y también para las frazadas, botas de lluvia y otros artículos que no usan a diario.
  10. Por último, les sugiero en cada cambio de temporada guardar aparte la ropa que creen que aún pueden usar. Siempre viene bien tener a mano algún extra por si cambia el clima y necesitamos abrigo en verano o mangas cortas en invierno.

Es fundamental que tengan muchísima paciencia con los niños. A veces juzgamos sus actos como si fueran adultos, y lo único que logramos es frustrarnos y enojarnos con ellos. Los cambios no van a ser de un día para el otro, y van a tener que repetirles mil veces que ordenen su ropa.

¿Cuesta mantener el orden? ¡Sí! ¡Mucho!

Es una tarea que se hace todos los días. Pero si somos consistentes en el mensaje y hacemos nosotras mismas lo que les pedimos a ellos, con el ejemplo van a aprender muchísimo más rápido. Es cuestión de tiempo, de ayudarlos y darles herramientas para que poco a poco se acostumbren a guardar ellos solitos. Y si ven que algo no está funcionando, es válido cambiar de método de orden hasta que encuentren el que más se acomode a sus familias. Lo más importante es que el sistema que empleen para organizar la ropa trabaje para ustedes y les permita recuperar rápidamente el orden al terminar el día.

María Celeste Sánchez ayuda a mujeres a organizar mejor sus hogares y tener más tiempo para hacer lo que les gusta. En www.corazoncasa.com.ar , a través de notas, imprimibles e imágenes de sus propios sistemas de organización, muestra que es posible vivir en un ambiente organizado sin gastar de más.

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