La vida de una madre sin duda es un acto de malabarismo constante, sin siquiera haber tenido el entrenamiento debido por profesionales del circo. Esto nos lleva a más y más mujeres que actualmente sufren del síndrome de mamá estresada.
Con la suerte de un malabarista las madres de hoy en día se enfrentan a esa realidad de sortear en el aire las innumerables tareas que realizan a diario. Y es que como no ser una mamá estresada si gran parte de la crianza recae sobre nosotras.
La crianza infantil supone un sin numero de tareas que de por si son interminables y para muchas madres resultan abrumadoras. En nuestra sociedad es común que a la mujer le toque encargarse de las tareas del hogar, sus ocupaciones laborales, las ocupaciones y actividades extras de los niños y todo esto sin deslindar su bienestar personal. ¿Te identificas? ¿Eres una mamá estresada?
Efectos y ejemplos de una mamá estresada
El estrés es una reacción que se deriva de las presiones físicas, emocionales y ambientales. Además, toda la familia se ve perjudicada cuando el estrés de mamá está fuera de control, en especial los niños pequeños. Diversos estudios han demostrado que hasta los fetos responden a las alteraciones de la madre cuando esta tienes estrés.
A medida del crecimiento los niños aprenderán de los adultos como hacer manejo del estrés. Por lo tanto es importante que la mamá estresada aprenda a reconocer las señales y síntomas para evitar los efectos dañinos del mismo.
Síntomas de una mamá estresada
- Tienden a subir tu ritmo cardiaco, presión sanguínea y tensión muscular.
- La resistencia a las enfermedades baja y tú se ve alterado tu proceso digestivo.
- Tu patrón de sueño se ve afectado (insomnio, pesadillas, constante somnolencia).
- El nivel de energía no es el mismo y tiene de a fluctuar.
- La menstruación se vuelve irregular.
- Los dolores o enfermedades tienden a empeorarse.
Señales que eres una mamá estresada
- Tienes a tener sentimientos de tensión, nerviosismo, ansiedad, temores, preocupación excesiva y la incapacidad para relajarte.
- Caes en depresión, desilusión, apatía, tristeza y la incapacidad de disfrutar.
- Te vuelves irritable, colérica y enojona.
Conductas de una mamá estresada
- Falta de atención en la apariencia personal.
- Descuido de las obligaciones y responsabilidades.
- Dificultad para concentrarse, tomar decisiones y resolución de conflictos.
- No terminas las tareas.
- Aislamiento familiar y de las amistades.
- Constantes peleas con los seres queridos.
- Dejar la practica de pasatiempos placenteros.
- Comes de más (gula).
- Aumento del consumo de cafeína, nicotina o alcohol.
- Desarrollo de hábitos nerviosos como comerse las uñas.
- Utilizas los medios electrónicos como una vía de escape.
Una vez que lees la lista e identificas la presencia de indicadores físicos, sicológicos o conductuales del estrés en tu sentir, pensar y actuar, es hora de que trabajes en ello por tu bienestar y el de tu familia.
Soluciones para dejar de ser una mamá estresada.
- Come alimentos sanos
- Haz ejercicio
- Evita el consumo de cigarrillo y alcohol
- Busca mejorar tu apariencia
- Trabaja en aumentar tu optimismo
- Pasa tiempo a solas frecuentemente
- Tomas siestas durante el día
- Respira profundo cuando te sientas abrumada
- Aprende a tensar y relajar tus músculos.
- Visualiza cosas positivas y que quieres lograr
- Medita o reza
- Toma baños calientes
- Busca pasatiempos que te ayuden a relajarte
- Mira programas de tv que te sirvan de inspiración
- Baila a solas
- Crea arte
- Vive un día a la vez
- Elije porque vale la pena afanarte y que no
- Acepta las cosas que no puedes cambiar
- Distingue las necesidades de los deseos
- Perdónate y tente paciencia
- Cuando falles, aprende para la próxima
- Busca lo gracioso o absurdo en las cosas
- Prepárate para lo peor (por si acaso), pero espera lo mejor
- Haz lo que desagradable antes de lo placentero
- Delega lo que puedan realizar los demás
- Ten citas con tu pareja
- Establece prioridades y relájate con el resto
- Organiza tu hogar
- Di «No» a las responsabilidades opcionales
- Desahógate con amigas o personas de tu confianza
- Toma clases de padres de familia
- Rodéate de personas de influencia calmante
- Consulta psicólogos y terapeutas profesionales cuando los necesites
Si cada día pones en práctica por lo menos algunas de estas recomendaciones, lograrás sentirte menos estresada y más realizada. El estrés es parte de la vida de una mamá, así que reconócelo, redúcelo y lo más importante ¡Relájate!
Es bueno leerlo..Siempre hay algo que aprender…..
A mí mi hija no me estresa, me estresan los mayores. ????