Las 6 enfermedades más comunes en los bebés

Como padres, nuestro mayor deseo es que nuestro bebé permanezca siempre libre de cualquier tipo de enfermedad, especialmente durante su primer año de vida. Sin embargo, durante este tiempo nuestro pequeño está muy expuesto a ciertas enfermedades comunes como la gripe, fiebre, diarrea o el vómito.

A pesar de que estas enfermedades suelen ser muy comunes en los bebés durante los primeros 12 meses del bebé y no un motivo para alarmarnos si nos percatamos de algunos síntomas, es muy importante que acudamos al pediatra para que nos oriente sobre cuál es el mejor tratamiento, debido a que en esta etapa el organismo de nuestro bebé es mucho más delicado y requiere mayores cuidados.

¿Cuáles son las enfermedades más comunes en los bebés?

Durante su primer mes de vida, los bebés pueden sufrir distintas enfermedades que quizás te alarmen, sobre todo si eres mamá primeriza. A continuación te contamos cuáles son las enfermedades más comunes de los bebés y cómo reconocerlas:

1. Vómito

Cuando hablamos de vómito, no nos referimos a cuando el bebé regurgita después de comer: lo que puede ocurrir cuando hacemos mucha presión en su barriga, al moverlo muy rápidamente durante un tiempo prolongado o porque simplemente había comido mucho.

El vomito suele tratarse de un síntoma de otra enfermedades o una reacción. No debe confundirse con la regurgitación

Por lo general, si un bebé parece sentirse afligido cuando vomita, haciéndolo en mayor cantidad y con más esfuerzo, es momento de sospechar que ocurre algo diferente a cuando regurgita,  en su mayoría de los casos no es fácil determinar la causa exacta del vómito. De hecho, en muchas ocasiones suele tratarse de un síntoma más de otra enfermedad, como una infección viral, aunque también puede deberse a problemas alimenticios. Lo cierto es que nuestro trabajo es acudir al pediatra para averiguar qué puede causar que el bebé vomite y cómo podemos ayudarlo.

2. Gripe

La gripe es una de las enfermedades más comunes en los bebés. En general, la gripe es causada por una diversa variedad de virus que se propagan por el aire, por lo que cualquiera puede contagiarse con extrema facilidad, especialmente los bebés, que pueden llegar a contagiarse de seis a diez veces al año debido a que su sistema inmune aún está desarrollándose. Además, ya que nuestros pequeños empiezan a conocer el mundo que los rodea tocando todo o intentando comer lo que sea que tengan en la mano, son más propensos a dejar que los virus que causan la gripe entren en sus organismos.

La gripe es una de las enfermedades más comunes en los bebés y niños debido a que su sistema inmune aún está en desarrollo

A pesar de esto, en bebés de 0 a 1 año la gripe se presenta con síntomas difíciles de reconocer a primera vista, debido a que su presencia puede parecer relativamente normal, como la irritabilidad, la falta de apetito, una nariz congestionada, estornudos o una respiración alterada.

Sin embargo, en casos determinados se pueden observar síntomas más perceptibles como una tos o fiebre leve, diarrea, vómitos y dolor de barriga. Estos síntomas se presentan primero de forma sigilosa hasta hacerse poco a poco más fuertes, calmándose finalmente en el transcurso de aproximadamente 10 días.

Aunque la gripe constituye una de las enfermedades más comunes en los bebés y podemos estar preparadas para tratar los síntomas más leves como la congestión nasal, es necesario que recurramos al pediatra una vez que síntomas como la fiebre o una tos persistente aparezcan.

3. Pañalitis o rozaduras de pañal

Más que una enfermedad, la pañalitis es un una expresión de que algo relacionado al uso de los pañales está afectando la delicada piel de nuestro bebé. De hecho, en los países donde los pañales no se usan, la dermatitis por rozaduras de pañal es casi desconocida.

Aquí podemos saber más de sobre la Dermatitis del pañal: ¿Qué es y cómo tratarla?

La pañalitis es muy frecuente en los bebés de 0 a 1 año, e incluso después. Esta es consecuencia de situaciones tan comunes como dejar al bebé con un pañal sucio más tiempo de lo normal, ponerle un pañal muy ajustado o uno muy grande que le pueda ocasionar la rozadura y fricción con la delicada piel de sus zonas íntimas, o incluso de una reacción alérgica del bebé a los componentes del pañal.

La pañalitis es muy frecuente en los bebés que usan pañales

Las rozaduras no siempre tienen la misma apariencia. La irritación podría ser muy leve con pequeños granitos rojos en una zona muy pequeña o presentarse con síntomas más fuertes y abarcar un área más extensa, con la piel hinchada, sensible al tacto e incluso un poco caliente.

Es muy importarte resaltar que si nuestro bebé presenta rozaduras de pañal no nos convierte en una madre descuidada, pues hasta los pañales más absorbentes del mercado no retienen todo el pipí del bebé, por lo que es casi inevitable su aparición en algún momento.

Sin embargo, podemos prevenir la irritación del pañal si ponemos en práctica estos sencillos consejos:

• Cambiar frecuentemente el pañal del bebé para mantenerlo limpio y seco. Incluso revisarlo en medio de la noche para saber si es necesario cambiarle el pañal.
• Lavar bien sus zonas íntimas cada vez que sea necesario. Un buen truco es mantener a la mano bolitas de algodón y una botellita de agua hervida para limpiar delicadamente al bebé. No es aconsejable utilizar toallitas húmedas que tengan alcohol o fragancias para limpiarlo, pues estos componentes pueden causar una irritación.
• Secarle la piel con una toalla suavemente y sin frotar.
• Aplicarle un poco de crema protectora en cada cambio de pañal para ayudar a proteger la piel de irritaciones.
• No ajustar mucho el pañal, es mejor dejarlo un poco flojo pero no debemos exagerar y comprar una talla tan grande que le genere rozaduras debido a la fricción causada por el movimiento.

4. Diarrea

Si bien es cierto que cuando los bebés están amamantando suelen presentar heces más suaves o líquidas en ocasiones, especialmente recién nacidos, debemos estar muy alertas ante la cantidad y la frecuencia con que nuestro bebé hace popó ya que la diarrea es una de las enfermedades más comunes de los bebés. Si notamos que empieza a hacer más veces de lo habitual y las heces son más blandas y acuosas, e incluso con muy mal olor, probablemente tenga diarrea.

Si nuestro bebé empieza caca hacer más veces de lo habitual y las heces son más acuosas, e incluso con muy mal olor, muy probable que el niño tenga diarrea.

El mayor peligro que supone la diarrea es la deshidratación del bebé, que debemos evitar a toda costa, por lo que si notamos que nuestro pequeño continúa presentando los síntomas después de dos días, debemos acudir inmediatamente al médico para iniciar el tratamiento adecuado.

En la mayoría de los casos, la diarrea en bebés es causada por infecciones bacterianas o virales, pero también puede aparecer como reacción alérgica a algunos alimentos o antibióticos. Darle de tomar jugo en una cantidad excesiva también puede causar la diarrea, pues tal y como señala la Academia Estadounidense de Pediatría, no es aconsejable que los bebés tomen jugos de frutas durante los primeros 6 meses, e igualmente no más de 4 onzas (118 ml) al día a partir de los 7 meses.

5. Estreñimiento

El estreñimiento afecta aproximadamente al 30% de los bebés

Aunque no es posible llevar un control sobre la veces que nuestro bebé hace sus deposiciones, ya que cada bebé tiene su propio patrón, hay un par de señales que nos permiten reconocer cuándo tiene estreñimiento. En estos casos, suele ocurrir que nuestro pequeño se muestra irritado, llorando insistentemente e incluso se pone rojo al intentar empujar las heces. Además, podemos notarlo si hace menos popó que de costumbre o si transcurre un período largo de tiempo sin que pueda hacer.

Aquí puedes leer más sobre  el estreñimiento en tu bebé

Según estudios, el estreñimiento afecta aproximadamente al 30% de los bebés en algún momento, por lo que es muy común. Si queremos aliviar sus síntomas o prevenirlos, podemos añadir algo de agua extra en su tetero para ablandar un poco el popó y facilitar su movimiento a través del intestino del bebé. Además, podemos masajear con delicadeza su abdomen o ayudarlo a mover sus piernitas de arriba hacia abajo para estimular la expulsión de las heces.

6. Infección de oído

La otitis o infección de oído es una de las infecciones más frecuentes en bebés de 0 a 1 año y es, de hecho, la segunda enfermedad más común en bebés solo detrás de la gripe. La fisiología del oído infantil permite que el moco que se produce en la garganta pueda acceder fácilmente a los conductos del oído, quedándose atascado y convirtiéndose en una fuente de infecciones con el tiempo.

Si para nosotros la otitis suele ser muy molesta y dolorosa, ¿puedes imaginar cómo es para un bebé?

Cuando presenta una infección de oído nuestro bebé se despierta llorando por la noche y no quiere comer nada debido a que siente dolor en el oído al tragar.

La infección de oído o otitis es la segunda enfermedad más común en bebés solo detrás de la gripe.

Las infecciones de oído deben ser tratadas con antibiótico durante el primer año de vida del bebé, por lo que una vez que nos percatemos de los síntomas debemos llevar a nuestro pequeño al pediatra para que le recete las medicinas adecuadas.

Visitar al pediatra

Reconocer los síntomas de las enfermedades más comunes en los bebés entre los 0 y 12 meses, nos ayuda a mantener la calma y actuar en consecuencia de los síntomas que presente. Sin embargo, no podemos simplemente tomarlo a la ligera o probar con los medicamentos que tengamos a mano para tratarlas. Recordemos que los bebés son muy sensibles y vulnerables por lo cual siempre es mejor consultar.

Si nuestro bebé presenta una o varias de estas enfermedades es necesario que consultemos al pediatra sobre cómo tratar los síntomas para aliviar el malestar.