¿Quieres iniciar la alimentación complementaria de tu bebé? Después de los primeros 6 meses de lactancia materna o artificial exclusiva, debes comenzar a incluir alimentos sólidos en la dieta de tu hijo, como verduras y frutas para bebés que fortalezcan su buen desarrollo y sistema inmune.
Las frutas para bebés son muy importantes en la alimentación infantil
Comenzar a ofrecerle frutas desde temprano a los bebés, como complemento a la lactancia, ayuda a que su paladar se vaya acostumbrando a nuevas texturas y sabores para hacer su alimentación variada, balanceada y nutritiva.
No obstante, no todas las frutas son recomendadas para bebés, especialmente en su primer año de vida, momento en el cual debes tener mayor cuidado en la incorporación de nuevos alimentos. Por esta razón, hemos seleccionado, todas las frutas que puedes darle a tu hijo para que la utilices como guía en esta nueva etapa alimentaria.

Frutas para bebés de 6 a 12 meses ¿Cuáles puede comer mi bebé?
Ofrecerle frutas a tu hijo entorno a los 6 meses de vida es esencial para complementar y enriquecer su alimentación desde temprana edad. Las frutas poseen un alto aporte de vitaminas, minerales, antioxidantes, fibras, hidratos de carbono que se convierten en energía y todo esto con un bajo porcentaje en calorías y sin grasas dañinas para el organismo de tu hijo.
La forma más recomendada para que los bebés se acostumbren a estos nuevos alimentos son los purés, compotas o papillas, pero también puedes dársela en trocitos pequeños sin triturar dada su textura suave.
Las primeras frutas para bebés son de textura suave y de fácil digestión
Debes tener en cuenta que existen frutas que pueden resultar alergénicas para los bebés, como el kiwi o la piña, pero no por esto debes evitarlas, solo debes retrasar un poco su introducción para ofrecérselas en el momento más idóneo.
¡Veamos cuáles son las frutas para bebés recomendadas de los 6 a 12 meses!
1. Manzana
La manzana es una de las primeras frutas que le puedes ofrecer a tu bebé en purés o papillas, a partir de los 6 meses de edad, cuando comienza la alimentación complementaria.
Su textura suave y sabor dulce es lo más llamativo para el paladar de los más pequeños.
La manzana además de contener múltiples vitaminas, es muy rica en fibra lo que favorece el tránsito intestinal
Propiedades y nutrientes
- Su composición es 85% agua, por tanto es refrescante e hidratante.
- Aporta fibra, potasio, sodio, calcio y hierro.
- Mejora problemas de estreñimiento y tránsito intestinal.
- Contiene vitaminas (A, C, E y del grupo B), hidratos de carbono, azúcares saludables y naturales.

2. Pera
Otra fruta que puedes comenzar a darle a tu bebé es la pera, ya que tiene una consistencia y sabor muy parecida a la manzana, por lo que muchos niños la prefieren.
De hecho, su textura es mucho más suave, su sabor más dulce y tiene mayor cantidad de agua, lo cual, la hace más refrescante e hidratante, ideal para los días calurosos.
Propiedades y nutrientes
- Contiene buena dosis de betacarotenos, aminoácidos y fibra.
- Reduce los problemas estomacales.
- Ayuda a mantener la hidratación y calmar la sed.
- Sus glúcidos, especialmente el sorbitol y la fructosa, facilitan la digestión.

3. Plátano
A partir de los 6 meses de edad también puedes comenzar a introducir el plátano, conocido como banana o cambur, en la dieta de tu hijo. Su textura es mucho más suave que la pera o la manzana, pero denso y su sabor muy dulce, por lo que es uno de los favoritos de los bebés.
La banana es una de las frutas para bebés que tu hijo puede comer con mayor facilidad
Propiedades y nutrientes
- Rico en potasio y ácido fólico, provitamina A y vitamina C.
- Regula las retenciones de líquido.
- Favorece la absorción del calcio en los huesos.
- Contiene minerales como el magnesio y el potasio.
- Fuente de carbohidratos, por tanto aporta energía.

4. Sandía
En algunos casos, la sandía puede provocar algún tipo de alergia en los bebés, por lo tanto, se recomienda introducir la sandía a partir de los 8 meses de edad. Pero si es de tu preferencia y te aseguras que hijo no es alérgico, también puedes dársela desde los 6 meses.
La sandía es una de las frutas para bebés más hidratantes y refrescantes
Propiedades y nutrientes
- Previene la deshidratación, ya que está compuesto por un 97% de agua.
- Mejora la digestión, debido a su contenido en fibra dietética.
- Su vitamina A fortalece la vista.
- Es fuente de licopeno que protege al corazón.

5. Melón
Para introducir el melón en la dieta de tu bebé, deberías esperar hasta los 7 u 8 meses de edad, preferiblemente. Esta fruta es un buen sustituto de los cítricos para los niños intolerantes o que todavía no puedan consumirlos.
Propiedades y nutrientes
- Es hidratante y jugoso por su buena cantidad de agua.
- Alto contenido en vitamina A, magnesio y potasio.
- Posee citrulina que fortalece el sistema inmune.
- Ayuda al crecimiento y a la buena digestión.

6. Piña
La piña tiene una consistencia un poco más dura que el resto de las frutas para bebés y su sabor es más ácido que dulce, por lo tanto, no es muy aconsejable incluirla a los 6 meses de edad, sino a partir de los 8 meses en adelante preferiblemente.
Propiedades y nutrientes
- Es una fruta jugosa que combate la deshidratación y refresca a tu bebé.
- Reduce la coagulación de la sangre y limpia las paredes arteriales.
- Mejora el estreñimiento y tránsito intestinal.
- Sus propiedades antiinflamatorias reduce infecciones como sinusitis.

7. Kiwi
Los pediatras retrasan la ingesta de kiwi hasta los 8 o 9 meses de edad, particularmente si la madre no consumió esta fruta durante el embarazo, pues podría causar alguna reacción alérgica en el bebé.
Propiedades y nutrientes
- Refuerza el sistema inmune y previene infecciones gracias a su alto contenido en vitamina C.
- Es rico en fibra, ayuda a la digestión y mejora el estreñimiento.
- Favorece la absorción de hierro y evita la anemia.
- Su ácido propeolítico ayuda a digerir las proteínas.

8. Albaricoque
El albaricoque podría ser potencialmente alergénico para tu bebé, por tanto, no deberías introducirlo en su dieta antes de los 10 meses de edad.
Se trata de una fruta con hueso, por tanto, debes ofrecérsela sin la semilla para evitar un posible atragantamiento.
Propiedades y nutrientes
- Contiene grandes cantidades de vitamina C.
- Posee fibra que ayuda a la digestión y genera sensación de saciedad.
- Buena fuente de vitamina A y C, carotenoides y licopenos.
- Combate la anemia, gracias a sus minerales como hierro, sobre y magnesio.

9. Fresa
El fuerte sabor y toque ácido de la fresa podrían ser un poco desagradables para el paladar de tu bebé, pero su textura es realmente blanda y algunas son más dulces.
No obstante, no debes darle esta fruta hasta que cumpla los 12 meses de edad, de hecho, algunos expertos recomiendan su inclusión hacia los 18 meses.
Propiedades y nutrientes
- Aporta vitaminas, especialmente la vitamina C.
- Contiene fibra y antioxidantes que protegen el corazón.
- Posee fósforo, hierro, potasio y calcio.

10. Naranja
Para introducir las frutas cítricas como la naranja, debes esperar por lo menos hasta los 12 meses de edad. No obstante, ten presente que los expertos señalan que retrasar la inclusión de alimentos alérgenos (que producen alergia), solo aumenta el riesgo de sufrir reacciones alérgicas.
Por tanto, lo más conveniente es que le des a probar esta fruta a tu bebé con precaución, si lo haces antes del primer año de edad:
- Ofrece un solo cítrico a la vez durante tres días seguidos.
- Preferiblemente en la mañana o antes de las 3 de la tarde.
- No lo acompañes de otro alimento nuevo.

Beneficios de las frutas para bebés
Las frutas para bebés son beneficiosas para su crecimiento y desarrollo, además de abrir el abanico de alimentos complementarios para brindarle nuevas texturas y sabores al paladar de tu hijo.
Pero los beneficios no terminan aquí, también es importante darle frutas a tu bebé por los siguientes motivos:
- Evitan la deshidratación infantil, gracias a que aportan buena cantidad de agua.
- Favorece la alimentación complementaria.
- Otorga los nutrientes que tu hijo necesita para su crecimiento.
- Mejora el tránsito intestinal y combate el estreñimiento de los niños estíticos.
- Proporciona la energía necesaria por ser ricas en hidratos de carbono.
- Ayuda al buen desarrollo de los músculos y huesos desde pequeños.
- Refuerza el sistema nervioso para fortalecer las defensas.
¿Cómo comenzar a darle frutas a mi bebé?
La alimentación complementaria es la introducción de los alimentos sólidos en la dieta de tu bebé y debe estar basada principalmente en frutas, pero solo las que sean permitidas de acuerdo a su edad. Como es el caso de la manzana, la banana y la pera, que puedes darle desde los 6 meses.
Las frutas representan nuevos sabores y texturas para el paladar de tu bebé
La forma ideal para ofrecer las primeras frutas es triturada o en purés, sin añadir azúcar o migas de galleta. Al principio, le podrás ofrecer una misma fruta durante 3 o 4 días seguidos para asegurarte que tu bebé la tolere y no le cause algún tipo de alergia.
Si quieres darle la fruta en trozos, puedes aplicar la técnica Baby Led-Weaning y cortar la fruta en forma de bastones grandes para que tu bebé pueda agarrarla por él mismo, eso sí asegúrate de quitar la piel y semillas. En el caso del cambur o plátano, solo necesitarás retirar la concha.

Consejos para introducir las frutas para bebés
A pesar de que lo más recomendable es darle las frutas crudas o al natural a tu bebé, existen otras maneras de ofrecéserlas que también resultan excelentes al momento de introducir la frutas como en papillas, compotas, batidos, zumos naturales y más adelante con yogures y cereales.
Al comprar las frutas debes elegir siempre la que esté fresca y ligeramente madura
Las frutas de textura un poco más duras como la manzana, es mejor no ofrecerla entera para evitar que el bebé pueda atragantarse, por tanto, es preferible dársela rallada o hervida en un principio. La naranja o mandarina puede comerla en gajos enteros, sin semillas.
Una vez que comiences la introducción de alimentos complementarios, se hará indispensable la inclusión de frutas en la dieta de tu bebé, pues sus nutrientes y propiedades son necesarios para el crecimiento y desarrollo de los niños desde temprana edad.